En medio del mes de las vacaciones en Chile, 13 madrugadores nos juntamos a celebrar al Señor, a través de la Santísima Virgen María, en un santuario cálidamente adornado con flores de la estación. Estamos comenzando el 2010, y junto con orar y compartir el pan, tuvimos la oportunidad de ser dirigidos en la liturgia (por primera vez) por nuestro hermano JuanS. (la semana pasada fue el turno de nuestro hermano ClaudioV (@ingcv) y la próxima le tocará a OscarB)
La liturgia de la palabra estuvo centrada en las lecturas de la multiplicación de los panes, y de la investidura de los ídolos de oro como dioses del pueblo israelí durante su éxodo. La reflexión fue dirigida hacia cómo los verdaderos líderes atienden las necesidades reales de su pueblo, mientras que otros toman decisiones que sólo permiten torcer el buen camino que las personas debieran seguir.
Después de habernos consagrado, una mayoría de los 13 que llegamos nos fuimos a tomar un reparador combo desayuno a una gasolinera cercana y a compratir un agradable momento de conversación en el salón VIP. Son las exigencias y matices que nos permiten estas agradables vacaciones en Santiago.
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